al ver su Felino Negro empezar a naufragar,
1000 cañonazos le tuvieron que brindar
para que esté se empezara a inquietar,
mis Corsarios, !a cantar!, vocifero el capitán
que por fin a llego el día de nuestro final,
quién antes quiera saltar,que no aguarde más
mas morirá sin hermandad,
mis piratas,esta vez la botella de Ron tendrá que aguardar,
que las aguas eternas,serán las que hoy beberán.